Y para romper el hielo, y rindiendo homenaje a esa naturaleza y a esa "pregunta de los jueves" origen sin duda de este cuaderno, pego un texto que escribí a la muerte de Copito de Nieve (ha llovido) que alguien tuvo a bien en conservar y que personalmente aún recuerdo con cariño y emoción.
Prometo que las
siguientes entradas serán actuales.
"¿Qué relación ha establecido el hombre con los animales?
Se puede tener la suerte de nacer como un animal
domiciliado (no confundir con domesticado) y pasar a formar parte de la familia y
ser tratado como uno más (la idea de comerse al perro, al gato o al canario
pasaría por canibalismo). Y es así como algunos se dedican a tener perros en
lugar de tener hijos, porque dan menos problemas, salen más baratos y te los puedes quitar de en medio cuando ya no te hacen tanta gracia. Y sobre todo
porque son el símbolo viviente de la regla de oro en la educación occidental:
"obedecer la voz de tu amo"; una película of course, "Los
exploradores", donde un extraterrestre interpreta la forma de vida en la
tierra a través de la televisión, y la conoce completamente salvo por un
detalle que no acaba de comprender; por qué aquel niño con tanto pelo nunca
dice nada, nunca habla, aquel niño al que todos llaman Lassie...
Seguidamente están los animales domésticos, que llevan una vida más o menos miserable (no sabrían llevar otra, como los domiciliados han perdido su esencia) pero que tienen el enorme privilegio y el sagrado destino de servir de alimento a los hombres.
Y por último están mis favoritos, véase Copito de Nieve. Animales salvajes que son arrancados de su hábitat natural para pasarse la vida sin hacer nada, pero que con un poco de suerte podrán convertirse en símbolo de una ciudad de vanguardia, que además velará por tu honor, dignidad y beatificación en tus últimas horas... después de haberte mantenido encerrado durante más de treinta años. Animales recluidos en cárceles, donde sólo existe la cadena perpetua y no hay posibilidad de reinserción; y lo que es aún más escalofriante a poco que se detenga uno a pensar, y una prueba más del error genético en que el hombre se ha convertido y del fracaso en su relación con la naturaleza: cárceles concebidas y diseñadas desde su proyecto y construcción, para ser alimentadas única y exclusivamente, siempre, con inocentes...."






